El gobierno de Brasil ha presentado formalmente al Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina un pedido de extradición de decenas de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro. Según el documento, muchos de ellos residen en Argentina como refugiados o de manera irregular, y son buscados por la justicia brasileña tras su presunta participación en el asalto a las sedes del Gobierno y el Congreso en Brasilia el 8 de enero de 2023, durante la toma de posesión de Lula da Silva.
La solicitud fue emitida por el juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Alexandre de Moraes, y llegó a la Cancillería argentina, que actualmente está analizando los pasos a seguir, según los medios locales.
La solicitud de extradición
El pedido de extradición fue inicialmente realizado por la Policía Federal de Brasil ante el Supremo Tribunal Federal, y luego remitido por el juez De Moraes al Ministerio de Justicia de Brasil. Posteriormente, se trasladó a la Cancillería argentina mediante los canales diplomáticos correspondientes.
La extradición es un procedimiento legal mediante el cual un país solicita la entrega de una o varias personas que se encuentran en otro territorio, con el fin de someterlas a un proceso penal o hacer cumplir una condena ya dictada. En este caso, Argentina deberá decidir si accede a la solicitud de su vecino sudamericano.
La prensa brasileña ha informado que el pedido incluye a 63 personas radicadas en Argentina, quienes habrían huido del país. Algunos de ellos ya han sido condenados a penas de hasta 17 años de prisión.
En junio pasado, las autoridades argentinas confirmaron la presencia de más de sesenta prófugos brasileños en su territorio. Varios de ellos han iniciado procesos para solicitar asilo político, aunque la resolución de estos casos aún está pendiente.
El tema adquirió mayor visibilidad cuando el pasado 30 de mayo, Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, participó en un acto organizado por La Libertad Avanza (LLA) en el Congreso de la Nación, donde pidió asilo político para estas personas que según él son perseguidos por el régimen de Lula da Silva y De Moraes.
Durante el evento, Bolsonaro también se preguntó a quién se puede recurrir cuando la justicia de un país está profundamente corrompida y actúa en complicidad con el gobierno izquierdista en el poder. Señaló que, en tales circunstancias, la única opción viable es exponer la situación de Brasil en foros internacionales, con la esperanza de que el caso sirva como advertencia para otras naciones.
Luego, en palabras para Mundo Libre Diario, Bolsonaro expresó que contempla la esperanza de que si Donald Trump gana la presidencia este año pueda ejercer la suficiente presión como para revertir la censura y la persecución política que rige actualmente en Brasil.
FUENTE: TIERRA PURA