Ofrecen dinero, entradas a museos y hasta marihuana. Los estados y las empresas estadounidenses buscan seducir a quienes todavía dudan en vacunarse contra el coronavirus.

Aunque Estados Unidos sigue aplicando millones de vacunas por día, el enfoque cambió. En vez de apuntar a la vacunación masiva, ahora se centra en captar a las personas que aún dudan en inocularse. El gobierno teme que se desarrollen nuevas cepas del virus y de que el país no alcance la inmunidad de rebaño si la mayoría de la población no recibió la vacuna.

Para combatir las dudas sobre la vacuna, las compañías y los funcionarios locales y de los estados han diseñado llamativas formas de captar la atención de los no vacunados.